A principios de este mes, la Unión Europea concedió con éxito al mayor obstáculo de USB-C, el conector Lightning de Apple, un plazo hasta 2024 para la transición al estándar que todo el mundo utiliza. Ahora, uno de los mayores mercados de electrónica de consumo del mundo podría seguir su ejemplo, ya que el gobierno indio planea no solo su propio mandato para que los teléfonos inteligentes sean compatibles con USB-C, sino que también podría estar considerando un estándar de carga similar para los dispositivos portátiles.
La Oficina de Estándares de la India (BIS) lleva unos meses siendo noticia por considerar el cambio a USB-C por las mismas razones que la UE: los intereses de los consumidores y la reducción de los residuos electrónicos. El secretario del Departamento de Asuntos del Consumidor, Rohit Kumar Singh, dijo a PTI que el BIS podría insistir en que todos los próximos wearables se entreguen con soporte para una solución de carga estándar (vía SamMobile). Entre los productos que se verían afectados por este cambio figuran relojes inteligentes, pulseras de fitness, auriculares inalámbricos y audífonos.
Incluso cuando solo estamos mirando relojes inteligentes, ya hay muchos enfoques diferentes para cargar. Algunos usan pines pogo y otros usan inducción inalámbrica, pero hay algunos puntos en común, como el uso de imanes para asegurar las cosas en su lugar. Actualmente, los reguladores del mercado indio no han revelado la solución exacta que tienen en mente para los dispositivos portátiles, pero es probable que no se aleje mucho del tipo de tecnología de carga inalámbrica compatible con relojes populares como la serie Galaxy Watch 5 o el Apple Watch.
Al menos, nos sorprendería mucho ver un enfoque totalmente novedoso para la carga de los wearables, ya que cualquier gran desviación de los estándares existentes podría resultar muy costosa de implementar, lo que probablemente provocaría el rechazo de los fabricantes. Cambios más pequeños podrían ser una píldora más fácil de tragar para el bien colectivo, y esperemos que ese sea el caso con el misterioso nuevo estándar.
Aunque un estándar significa que los consumidores pueden utilizar un cargador para todo, la transición para la mayoría de los consumidores no será inmediata, y podrían pasar algunos años hasta que los dispositivos más antiguos sean eliminados. Aún no se sabe nada de plazos, pero el hecho de que más gobiernos sigan los pasos de la UE y establezcan normas de carga parece un paso en la dirección correcta.